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El nuevo coronavirus es un tipo de virus que causa síntomas similares al resfriado.
Todos los resfriados son causados por un virus y tienen nombres como rinovirus, adenovirus, parainfluenza y coronavirus. Aunque el coronavirus es un tipo de virus que causa una enfermedad de las vías respiratorias superiores como la mayoría de los resfriados, una “nueva” versión de coronavirus comenzó a causar una enfermedad respiratoria que podría ser peor que un resfriado. Esta nueva enfermedad se llama COVID-19 y recientemente se ha extendido a los Estados Unidos desde China y a otros países.
Dado que COVID-19 es nuevo, significa que es probable que muchas personas puedean infectarse con él. Nuestro sistema inmunológico todavía no sabe cómo destruir este proceso infeccioso. La mayoría de las personas con COVID-19 tendrán síntomas leves similares a los de un resfriado, pero en casos particulares es posible que se requiera una hospitalización para tratar sintomas severos. Al igual que todos los resfriados, esta nueva versión del coronavirus no se puede tratar con antibióticos. Las principales cosas que le pueden ayudar mientras se recupera en casa son los reductores fiebre, ingesta de liquidos (como el agua) y el reposo.
Si le preocupa que su hijo pueda tener actualmente COVID-19 o que haya estado expuesto a él y necesita pruebas, podemos ver a su hijo en persona o mediante una visita por video.
Síntomas
Las personas que deben hacerse la prueba de la nueva cepa de coronavirus son:
Las personas que pudieron haber estado expuestas en los últimos 14 días Y tienen síntomas que incluyen fiebre, tos o dificultad para respirar.
Tos
Fiebre
Dificultad para respirar
Los síntomas de COVID-19 pueden ser similares a otras afecciones, como gripe, resfriados y alergias, y puede ser útil comparar lo que sucede con cada una de esas afecciones:
¿Quién debe hacerse la prueba?
En este momento, la propagación del virus que causa COVID-19 en la comunidad se ha vuelto extensa y las pruebas se recomiendan para las personas que tienen síntomas y para las que han tenido contacto cercano con un caso conocido / sospechoso.
El contacto cercano se define como haber estado a menos de 6 pies de una persona infectada durante un total de 15 minutos durante un período de las ultimas 24 horas.
Cualquier persona que haya estado en contacto cercano con un caso conocido / sospechoso también debe ponerse en cuarentena durante 14 días, incluso si no hay síntomas, porque la enfermedad puede desarrollarse en cualquier momento entre 2 y 14 días después de la exposición.
¿Qué sucede después de realizar una prueba?
Las pruebas ayudan a identificar a las personas que actualmente están contagiadas con el virus que causa el COVID-19, pero una prueba negativa no siempre significa que la enfermedad no se desarrollará dentro de un período de 14 días después de la exposición. Pueden pasar hasta dos semanas después de la exposición para que luego se desarrolle la enfermedad, por lo que se necesita un período de cuarentena de 14 días después de la exposición. Hable con su proveedor de atención médica sobre los pasos que debe tomar para protegerse, proteger a su familia y a la comunidad de este virus si ha estado expuesto.
Para las personas cuyos resultados de las pruebas son positivos, es necesario un aislamiento de 10 días para que nadie más corra el riesgo de enfermarse. Minimizar la exposición a otros es la forma más importante de detener la propagación del COVID-19. La mayoría de las personas se recuperan dentro de ese período de 10 días y comienzan a sentirse mejor, pero cualquier persona con síntomas que empeoren deberá buscar atención médica.
Con la reapertura de escuelas y negocios, más personas corren el riesgo de exposición y las pruebas son una parte importante para mantener los niveles de infección bajos para que todos podamos regresar con seguridad a tantas actividades como sea posible. Identificar a cualquier persona en riesgo de propagar el virus mediante pruebas, además de poner a las personas expuestas en cuarentena hasta que haya pasado el riesgo de infección, nos mantendrá a todos seguros y saludables.
Tratamiento
El tratamiento para la nueva cepa de coronavirus es el mismo que para cualquier otro resfriado: control de la fiebre, mantenerse hidratado y guardar reposo.. No hay medicamentos que traten específicamente los virus del resfriado. Nuestro sistema inmunitario luchará contra estos virus.
Un profesional de la salud debe evaluar cualquier preocupación por las posibles complicaciones de un resfriado producido por virus, como dificultad para respirar, deshidratación, fatiga extrema o fiebre alta y prolongada.
Si cree que su hijo puede tener un nuevo coronavirus o puede haber estado expuesto, visítenos en una de nuestras clínicas o por video visita para evaluación y pruebas.
Aplanar la curva
Los casos confirmados de COVID-19 aumentarán exponencialmente sin distanciamiento social, cruzando eventualmente nuestro umbral de capacidad hospitalaria.
Según los CDC, el período de incubación después de la exposición al nuevo coronavirus puede variar de 2 a 14 días, incluso si no presenta síntomas aún así es posible transferir el virus. Hacer distanciamiento social es importante porque podrías estar propagando el virus sin siquiera saber que has sido infectado.
El Washington Post (enlace a continuación) ha creado animaciones simples para representar visualmente cómo el distanciamiento social puede afectar a la población.
Prevensión
- Lavarse las manos con agua y jabón por al menos 20 segundos a lo largo del día,
especialmente cuando ha habido contacto con personas en publico. Se puede usar gel de alcohol si el lavado de manos no es posible, pero el lavado es mejor. - Quédese en casa cuando haya signos de enfermedad. Como fiebre, tos o secreción nasal.
- Toser en la curva del codo en lugar de manos.
- Evite tocarse la cara: las enfermedades pueden encontrar el camino hacia su cuerpo a través de los ojos, la nariz y Boca.
-
Use un cubrebocas (sobre su nariz y boca) para protegerse y proteger a los demás.
- Consuma alimentos saludables y asegúrese de que todos los miembros de la familia esten durmiendo lo suficiente.